domingo, 27 de febrero de 2011

La matanza

Un día espléndido de sol, para un día de festejo: mañana de matanza, de convivencia que se viene realizando durante bastantes años, para recordar las tradiciones ancestrales de los pueblos.
Desayunos con migas y café, a las nueve de la mañana en familia.
La mañana trascurre entre saludos, charlas con personas que hace tiempo que no vemos, esperando para saborear los torreznos que estaban buenísimos, haciendo tiempo para que se haga la comida, que se sirve a las tres. Patatas con carne, un vaso de vino, naranja de postre y dos pastas de té, todo un detalle.
Llegada la entrada de la noche, nos anima una orquesta para comernos una prueba de carne muy jugosa, donde se da por terminado un día de colesterol.
La noche fué para los jóvenes.
Esperemos llegar otro año más.